Lo primero, tranquilidad. Tomártelo como si fueses a ascender el puerto a pie, es decir, sin prisas y disfrutando del momento. Si te lo planteas así, pilotarás con una velocidad constante sin acelerones ni frenazos que, en un momento dado, pueden hacerte perder el control de la moto.
Ten mucho cuidado con el tráfico que te encuentres de frente, especialmente en pasos estrechos y curvas. No pierdas de vista las señales porque te irán ‘cantando’ el nivel de peligrosidad de las curvas que tienes delante. Ten especial atención con los coches que están de turismo. Es fácil que no conozcan bien la carretera e invadan el carril contrario en una sucesión de curvas.
No caigas en el error de pensar que son carreteras desiertas y puedes dar rienda suelta a tus ganas de ‘circuito’. En cualquier momento, puedes tener una caída o un accidente. Piensa que en sitios con una accesibilidad difícil, la ayuda puede tardar mucho más en llegar.
Uno de los momentos más tensos y emocionantes a la vez se produce al descender un puerto de montaña. Si en coche, en ocasiones, da vértigo, imagina en moto. Hay que tener un buen control de nuestro cuerpo, el peso de la moto y los frenos para hacerlo bien durante todo el tiempo, es decir, hay que ser un piloto experimentado para saber comportarse curva tras curva. De nuevo, tranquilidad, sentido común y precaución.
No olvides que cuesta abajo la presión del neumático sobre el asfalto es menor que en llano o cuesta arriba y, por tanto, es más fácil sufrir un bloqueo frenando debido al menor agarre de las ruedas. La revista Motociclismo ofrece algunas pautas que pueden servirte como: evitar llegar demasiado deprisa a cada curva, ayudarte del freno trasero para no sobrecargar el tren delantero o llevar la moto por donde nosotros queremos durante la curva y no limitarnos a “tirarla” ya que podría llevarnos hacia el exterior. Si pinchas en el enlace, tendrás acceso a todos sus consejos para enfrentarte con éxito a curvas cerradas y “horquillas”.
POR MARTA R.R.
Algunas de mi restauraciones
Vespa 125 cc Año 1956
El antes El despues
El antes VESPA 125 CC N AÑO 1957
El despues
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El antes VESPA 160 cc AÑO 1965 El despues
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VESPA PRIMAVERA 125 cc AÑO 1979
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VESPA 160 GT AÑO 1967
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VESPA SUPER 50 AÑO 1969
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VESPA PK 75 XL AÑO 1987
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ALGUNAS MAS, PINCHA PARA VERLAS EN LA VESPA
Reparando los tambores de freno de las ruedas.
Como son dse encontraba el cubo del eje delantero.
Antes de nada, lo primero que hay que hacer es limpiarlos con una hidrolavadora.
Después se lijan, pero ya aviso que es un proceso muy lento y que cansa porque no hay espacio para meter la mano.
En estos casos es muy útil la famosa DREMEL, lo que pasa es que es un pelín cara. De todos modos hay multitud de herramientas parecidas en cualquier ferretería y a mejor precio.e aluminio, y se decide pintarlos con "gris de llantas". En la foto podéis ver el estado en el que
El paso siguiente ya es el pintado.
Los puedes pintar con un gris de llantas o ha pistola.Te lo venden en cualquier sitio de recambios de coche y lo bueno es que también lo hay en Spray (algo más caro)
Referncias numericas de los rodamientos para PK125XL
Para el que esté interesado en adquirir los rodamientos y retenes sin complicarse mucho, las referencias son:
LOS AÑOS DE LA ILUSIÓN ……….O LA ILUSIÓN DE LOS AÑOS
Desde hacia años tenia en mente hacer un trabajo ¡digamos¡…… diferente... especial en una vespa…..un poquito de magia si pudiera ser… pero también me conformaría con ser ingenioso e inventivo en mis ilusiones y deseos para este proyecto y creo que lo he conseguido.
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