Por todos y todas los que se fueron en la soledad del silencio, y por todos aquellos que están luchando para poder abrazar de nuevo la vida, ¡¡respirar¡¡ os necesitamos.
«No te rindas, por favor no cedas, aunque el frío queme, aunque el miedo muerda, aunque el sol se esconda, y se calle el viento, aún hay fuego en tu alma, aún hay vida en tus sueños. Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo, porque cada día es un comienzo nuevo, porque esta es la hora y el mejor momento, porque no estás solo, ¡porque yo te quiero!»
Mario Benedetti